Mejores hoteles en Torremolinos

Torremolinos, el icono del turismo de sol y playa

Torremolinos debe al turismo internacional todos sus sinsabores pero también todas sus ventajas. Este antiguo asentamiento de algunas de las civilizaciones más antiguas del Mediterráneo es hoy uno de los destinos punteros de la conocida “Costa del Sol”. Las playas de arena fina, el clima templado y la oferta turística llevada a su máxima expresión son algunos de los atractivos que ofrece esta localidad andaluza a sus visitantes. En los últimos años, la ciudad ha tratado de sacudirse el distintivo de “destino de sol y playa para estudiantes” para recuperar su herencia cultural y atraer también a otro tipo de visitantes que buscan otros atractivos en sus viajes, más allá del buen tiempo y el mar.  

En busca del turismo de calidad

Solo doce kilómetros separan Torremolinos de la capital de la provincia, Málaga. La importancia de esta región se plasma en la riqueza de hallazgos de la época fenicia, griega, romana y árabe. Los primeros escritos que referencian esta ciudad datan del año 1489, una época en la que los Reyes Católicos trataban de impulsar la repoblación de tierras reconquistadas a los árabes. Esta zona, conocida entonces como Torres de Pimentel, pasó rápidamente a estar bajo la jurisdicción de la ciudad de Málaga, pero su enclave estratégico le permitía contar con castillos y fortalezas desde donde construir un fortín contra posibles ataques. El Castillo de Santa Clara, del siglo XVIII, es todavía una buena muestra de este pasado defensivo.

Consolidación como potencia turística

Pero sin duda el mayor reto vivido por Torremolinos se produjo en la segunda mitad del siglo XX, cuando se empezó a explotar su atractivo turístico. Hotel.info cuenta con más de un centenar de referencias de alojamiento solo en esta ciudad, por lo que no será difícil encontrar una propuesta que se adecúe a cada preferencia y bolsillo. Sin embargo, es conveniente ser previsor para reservas estivales: las plazas hoteleras son numerosas pero también lo sigue siendo la demanda.